Los ataques de este día en Bruselas no son mas que la mas reciente exhibición del ya tan conocido Estado Islámico, responsables de los ataques terroristas de los últimos años y según ellos responsables de los que están aun por venir en muchos lugares del mundo.
No se puede ocultar que los tenáculos de este grupo tienen un alcance inmenso, lo que nos hace pensar que ¿en que momento dejamos crecer este cancer?, actualmente el EI tiene locales trabajando en sus redes para perjudicar a sus propios países, la amenaza es constante y creciente.
El turno en esta ocasión fue para Bélgica, anteriormente Francia, Irak y Siria ya sintieron el efecto del mensaje que quiere transmitir este grupo de extremistas y que están dispuestos a transmitirlo a cualquier costo.
Las muertes son aun mas lamentadas cuando se dan por manos de personas que sin ningún remordimiento le quitan la vida a otro ser humano, a otro ser vivo. Hoy no esta Bélgica de luto, es el mundo entero que llora y sufre por un grupo de criminales que se escudan en su religión para asesinar de manera indiscriminada y destruir poco a poco el mundo, un mundo en el que ellos mismos viven.
El despertar debe estar cerca, es hora de solidarizarse y comprender la magnitud de lo que esta pasando en nuestra propia casa, y sobre todo de mantener mas que nunca la esperanza de que mejores tiempos vendrán para el mundo y sobre todo para Siria, quienes día a día viven situaciones como las de Bruselas o París.
Hoy la solidaridad es para Bélgica y para todo el que ha sufrido a raíz de estas personas o de cualquier grupo criminal, hoy la solidaridad es para el mundo que mas que nunca debe unir sus esfuerzos para salir adelante.
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