Cada 1 de abril hemos visto circular todo tipo de mentiras y bromas que cualquier otro día se considerarían inaceptables. En América Latina se sigue esta tradición, que como muchas otras que celebramos hoy en día tiene un origen mucho más profundo y por mucho alejado a lo que acostumbramos a ver.
En el siglo XVI el año nuevo se celebraba desde el 25 de marzo hasta una semana después del 1 de abril. Con el cambio de la fecha del año nuevo al 1 de enero por el Papa Gregorio XIII (de ahí el nombre de Calendario Gregoriano) se dejó de lado esta celebración, sin embargo en muchos países tardaron en adoptar este calendario y seguían celebrando el año nuevo el 1 de abril, por lo que eran llamados tontos o "fools" en inglés.
Este día se celebra con bromas y mentiras en prácticamente toda Europa en donde incluso los medios de comunicación más importantes se unen a esta tradición, en nuestro continente se celebra a manera de entretenimiento y no como una celebración real así como en esos países que siglos atrás llamaron tontos o fueron llamados tontos por el cambio al calendario gregoriano.
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