Cayetano Santos Godino nació el 31 de octubre de 1896 en Buenos Aires, Argentina. La historia de ese país nunca olvidara a ese niño de 15 años que fue encontrado culpable de varios asesinatos. En las calles se le conocía como "El Petiso Orejudo".
Fiore y Lucia Godino eran originarios de Italia. En 1884 decidieron abandonar Roma buscando mejores oportunidades para establecerse como familia y migraron rumbo a Buenos Aires en Argentina.
Una vez establecidos Fiore comenzó a mostrar su verdadero rostro. Se convirtió en alcohólico y golpeador y poco antes del nacimiento de Cayetano contrajo Sífilis. Gracias al desastroso estilo de vida, consumo de sustancias y enfermedades su hijo tuvo graves problemas de salud al momento del nacimiento.
Cayetano padecía de enteritis, lo cual lo puso en mas de una ocasión al borde de la muerte.
La pareja tuvo otro hijo llamado Antonio, el cual nació con epilepsia a raíz de los problemas de su padre. Antonio decidió no ser victima de su padre y siguió su ejemplo y formo parte de la violencia en contra de Cayetano.
Aparte de eso se convirtió al igual que su madre en el blanco de los abusos de su padre quien lo golpeo durante toda su niñez. Poco a poco todo se acumulaba en el niño que estaba muy cerca de convertirse en el primer asesino serial en la historia de Argentina.
La calle se convirtió en su hogar y su escuela, pese a todo el sufrimiento hizo su mayor esfuerzo por recibir educación, sin embargo no logro avanzar y deambulo por la vida.
Crímenes
El historial criminal de Cayetano Godino comenzó en 28 de septiembre de 1904, en ese momento tenia apenas siete años de edad.
Su primera victima fue Miguel Depaola de dos años de edad, a quien llevó a un lugar aislado para golpearlo, tras darle una paliza lo arrojó sobre unas espinas. Una mujer se percató de lo que sucedía y llamó a la policía. Las autoridades se llevaron a ambos menores para que fueran recogidos en la estación por sus padres.
Un año mas tarde vuelve a las andadas con una niña de un año y medio llamada Ana Neri, hija de una de sus vecinas. Cayetano la lleva a un solar baldío para y la golpea en repetidas ocasiones en la cabeza, nuevamente es encontrado en el acto pero dado que apenas tenia ocho años fue dejado en libertad.
Un año después en Marzo de 1906 asesinó a María Rosa Face de tres años de edad, siendo este el primer asesinato de Godino. En su momento nadie sospecho de el, sin embargo mas adelante confesó el crimen.
Según su relato llevó a la pequeña a un solar baldío en la colonia Rio de Janeiro donde trató de estrangularla. Al no poder quitarle la vida decidió enterrarla viva en una zanja. Al visitar al lugar se dieron cuenta de que se había construido un edificio en el lugar por lo que no pudo recuperarse el cadáver, sin embargo concuerda con la ficha de desaparición de una niña de tres años llamada María Rosa Face interpuesta el 29 de marzo de 1906.
El 5de abril de 1906 tras realizar su primer asesinato y pasar desapercibido fue denunciado por su propio padre por matar aves domesticas. Se encontró una caja llena de cadáveres de aves y otras mas escondidas en la casa.
El acta levantada cita:
Su primera victima fue Miguel Depaola de dos años de edad, a quien llevó a un lugar aislado para golpearlo, tras darle una paliza lo arrojó sobre unas espinas. Una mujer se percató de lo que sucedía y llamó a la policía. Las autoridades se llevaron a ambos menores para que fueran recogidos en la estación por sus padres.
Un año mas tarde vuelve a las andadas con una niña de un año y medio llamada Ana Neri, hija de una de sus vecinas. Cayetano la lleva a un solar baldío para y la golpea en repetidas ocasiones en la cabeza, nuevamente es encontrado en el acto pero dado que apenas tenia ocho años fue dejado en libertad.
Un año después en Marzo de 1906 asesinó a María Rosa Face de tres años de edad, siendo este el primer asesinato de Godino. En su momento nadie sospecho de el, sin embargo mas adelante confesó el crimen.
Según su relato llevó a la pequeña a un solar baldío en la colonia Rio de Janeiro donde trató de estrangularla. Al no poder quitarle la vida decidió enterrarla viva en una zanja. Al visitar al lugar se dieron cuenta de que se había construido un edificio en el lugar por lo que no pudo recuperarse el cadáver, sin embargo concuerda con la ficha de desaparición de una niña de tres años llamada María Rosa Face interpuesta el 29 de marzo de 1906.
El 5de abril de 1906 tras realizar su primer asesinato y pasar desapercibido fue denunciado por su propio padre por matar aves domesticas. Se encontró una caja llena de cadáveres de aves y otras mas escondidas en la casa.
El acta levantada cita:
En la Ciudad de Buenos Aires, a los 5 días del mes de abril del año 1906, compareció una persona ante el infrascripto Comisario de Investigaciones, el que previo juramento que en legal forma prestó, al solo efecto de justificar su identidad personal, dijo llamarse Fiore Godino, ser italiano, de 42 años de edad, con 18 de residencia en el país, casado, farolero y domiciliado en la calle 24 de Noviembre 623. Enseguida expresó: que tenía un hijo llamado Cayetano, argentino, de 9 años y 5 meses, el cual es absolutamente rebelde a la represión paternal, resultando que molesta a todos los vecinos, arrojándoles cascotes o injuriándolos; que deseando corregirlo en alguna forma, recurre a esta Policía para que lo recluya donde crea oportuno y para el tiempo que quiera. Con lo que terminó el acto y previa íntegra lectura, se ratificó y firmó. Fdos: Francisco Laguarda, comisario. Fiore Godino. Se resolvió detener al menor Cayetano Godino y se remitió comunicado a la Alcaidía Segunda División, a disposición del señor jefe de policía.
Godino fue encarcelado durante dos meses, tras los cuales fue liberado y al no poder continuar en la escuela continuó vagando por las calles. El 9 de septiembre de 1908 ataca nuevamente, en esta ocasión a un niño de dos años llamado Severino Gonzales Caló.
El atacante lo llevo a la bodega del Instituto Sagrado Corazón y lo sumerge en un bebedero para caballos para luego poner la tapa y dejar al pequeño encerrado y ahogándose, sin embargo fue encontrado en su intento y Severino fue rescatado.
Cayetano asegura que estaba tratando de liberarlo pues una mujer lo había encerrado en el bebedero. Fue llevado a la estación pero nuevamente liberado al día siguiente. Apenas una semana después ataco de nuevo. En esta ocasión un niño de 22 meses llamado Julio Botte, a quien le quemo los parpados con un cigarrillo. Esta vez fue descubierto por la madre de la victima pero escapo.
Tras este hecho sus padres deciden nuevamente entregarlo a la policía y es encerrado durante tres años. Cayetano aprovecha el tiempo y aprende a leer y escribir pero su personalidad se vuelve mas fuerte. Es liberado por petición de sus padres pero inmediatamente regresa a la calle, donde por sus grandes orejas se le conoce como El Petiso Orejudo.
El 17 de enero de 1912 quemó una casa en la Calle Pavón, según el por el simple gusto de ver a los bomberos caer en el fuego.
El 26 de enero de 1912 asesino a Arturo Laurora de 13 años. Su cadáver fue encontrado golpeado, semidesnudo y con un acuerda en el cuello.
El 7 de marzo de 1912 quemó viva a Reyna Bonita Vainicoff de cinco años de edad. La niña falleció por las quemaduras tras 16 días en agonía en el Hospital para Niños.
El 8 de noviembre de 1912 le dijo a Roberto Russo de dos años que le daría dulces si lo acompañaba a un almacén. Lo llevo a un matorral y lo ato de pies y manos y lo ahorco con una cuerda. Fue encontrado por un trabajador y este llama a la policía.
Cayetano asegura que estaba tratando de liberarlo pues lo encontró así, fue liberado por falta de pruebas.
El 16 de noviembre llevo a Carmen Ghittone de tres años a un matorral y comienza a golpearla salvajemente. Nuevamente es descubierto en el acto y logra escapar.
Cuatro días después secuestra a Catalina Naulener de cinco años. La niña se resiste y el la golpea, un vecino escucha e interviene para rescatar a la mejor y Cayetano escapa nuevamente.
El 3 de diciembre de 1912 comete su ultimo crimen. Gesualdo Giordano de tres años se encontraba jugando con sus amigos como todos los días.
El Petiso Orejudo salió a vagar como siempre ignorando los gritos de su padre y encontró el grupo de niños en la Calle Progreso.
Se unió al grupo y se mostro muy amigable como siempre para ganar su confianza, comenzaron todos a jugar y adoptaron al orejudo en su grupo. El elegido fue Gesualdo, a quien le pidió que lo acompañara por unos dulces.
Caminaron tranquilamente hasta llegar a un almacén donde compraron algunos chocolates. Cayetano le da algunos a su acompañante pero le dice que le dará el resto si lo acompaña a otro lugar. Al llegar a la Quinta Moreno el niño comienza a llorar y se rehúsa a entrar, pero ya es demasiado tarde, todo esta decidido y el asesino lo obliga a entrar lo acorrala donde había un horno de ladrillos.
Godino se quita la cuerda que usa como cinturón, tira al niño al suelo y coloca su rodilla en el pecho y enrolla 13 veces la cuerda en su cuello para estrangularlo...pero el se resiste, así que decide amárrarlo de pies y manos pero Gesualdo se aferraba a la vida así que decidió matarlo de otra manera y comenzó a buscar su herramienta.
Su búsqueda lo lleva fuera del edificio donde se encuentra con el padre de Gesualdo, al preguntarle si lo había visto un dudo en negarlo y le recomendó ir a la estación de policía mas cercana. El Petiso Orejudo encontró un enorme clavo de 10 centímetros y se dirige donde su victima para clavárselo en la cabeza con una piedra mientras se retorcía en agonía.
El asesino se presento en el funeral porque deseaba ver si el cadáver tenia todavía el clavo. Para ese entonces el ya era el sospechoso principal y por la madrugada las autoridades llegaron a su casa y encontraron en su pantalón el articulo donde se relataba su asesinato y pedazos de la cuerda que corto para amarrarle las manos cuando se movía mucho.
El 4 de diciembre de 1912 fue arrestado Cayetano Santos Godino, El Petiso Orejudo.
Condena
Confesó tres homicidios y varias tentativas. En noviembre de 1914 fue declarado legalmente irresponsable y se hizo todo lo posible para que fuera encerrado en el Hospicio de las Mercedes por tiempo indefinido. estando ahí ataco a dos pacientes, uno que se encontraba postrado en cama y otro en silla de ruedas.
Tras el ataque y un intento de escape se apelo para que fuera recluido en una penitenciaria mientras no hubiese un asilo adecuado.
Fue enviado a la Penitenciaria Nacional.
Tras 10 años, en 1923, fue trasladado al Peal de Ushuaiua en Tierra de Fuego. Se le conocía como "la prisión del fin del mundo". En 1927 se le realizo cirugía para reducir el tamaño de sus orejas pues algunas personas creían que ahí acumulaba toda su maldad.
En una ocasión los reos lo apalearon de tal manera que tardo 20 días en salir del hospital, todo porque asesino el gato que vivía en la cárcel y que todos querían como la mascota del lugar.
En 1936 pidió su libertad pero fue negada luego de que médicos aseguraran que era un peligro para todos los que le rodeaban.
Falleció el 15 de noviembre de 1944, oficialmente por la ulcera que sufría desde pequeño, sin embargo hay muchos elementos que no quedan claros.
Fue enviado a la Penitenciaria Nacional.
Tras 10 años, en 1923, fue trasladado al Peal de Ushuaiua en Tierra de Fuego. Se le conocía como "la prisión del fin del mundo". En 1927 se le realizo cirugía para reducir el tamaño de sus orejas pues algunas personas creían que ahí acumulaba toda su maldad.
En una ocasión los reos lo apalearon de tal manera que tardo 20 días en salir del hospital, todo porque asesino el gato que vivía en la cárcel y que todos querían como la mascota del lugar.
En 1936 pidió su libertad pero fue negada luego de que médicos aseguraran que era un peligro para todos los que le rodeaban.
Falleció el 15 de noviembre de 1944, oficialmente por la ulcera que sufría desde pequeño, sin embargo hay muchos elementos que no quedan claros.
Se sabe poco de su vida tras las rejas pero se supo que falleció tranquilo y sin confesar ningún pecado. Se cree que los reos lo habrían asesinado tras lo sucedido con la mascota, versión que parece muy posible pues fue agredido y violado en repetidas ocasiones durante su encierro.
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